Jugando a las escondidas con Gaviria
La distancia entre una mala mentira y el ridículo es muy poca. Como ejemplo, la amenaza de 24 horas a ‘RH’ que le sirvió para eludir un debate. Nuestros lectores habrán jugado alguna vez en su vida las escondidas. Si lo han hecho, recordarán que no se desarrolla en equipo, pero