La ignorancia de un ignorante se conoce no por el desconocimiento en la materia que consulta sino por la estupidez de su pregunta.
Al borde de la locura nos tiene la estupidez de algunos compatriotas con preguntas propias de deficientes mentales con neuronas de uribista. Si usted lee nuestra columna, por favor, no nos haga las preguntas que a diario nos hacen algunos.
“¿Y tú qué opinas? ¿Será que si gana Petro quedaremos como Venezuela?” Nuestra respuesta es inmediata: “No seas imbécil. ¿Acaso no te das cuenta que hace mucho rato estamos por debajo de Venezuela? ¡Si ya estamos llegando al nivel de Haití!”
Otro cretino salió con la siguiente sandez: “Ala, hermano, ¿no crees que con ‘Fico’ Gutiérrez podríamos estar jugando la carta del triunfo?”. Aunque tuvimos toda la intención de agarrarlo por el pescuezo –como a gallina en San Pedro, hasta que saque la lengua–, nos revestimos de paciencia y con voz cariñosa le respondimos: “¿En qué bobódromo estudiaste para hacer tamaña estupidez de pregunta? Es obvio que ‘Fico’ es made in Uribe y la resultante de esa obra es, ni más ni menos, que un paraquito que nos llevará a un lugar más profundo que donde nos dejó el señor Duque.”
Muchos con preguntas del mismo caletre y tema, porque los colombianos no saben hablar de cosa distinta luego de que se quedaran sin contenido después del estruendoso fracaso de la selección de fútbol, lo que terminó por convertirlos en politólogos o brujos de alcantarilla para dar resultados electorales.
La más ridícula de todas las preguntas nos la hizo una señora esta semana: “¿Ustedes qué opinan de que los ricos de este país ya tengan el tiquete listo para irse de Colombia si gana Petro? Porque tiene asustado a todo el mundo. Al del negocio de al lado; tanto al que vende paletas como al que vende fruta.” Nuestra respuesta –tratándonos de serenar– se limitó a recordarle que Petro sí sabe de geopolítica. Que a él no le ha pasado por la mente espantar a los dueños del capital y de la industria, porque los necesita, así como el país los necesita para salir adelante.
Lo que muchos no han podido entender es que Gustavo Petro es una persona a quien le cabe el país en la cabeza y conoce las consecuencias del populismo económico. Petro sabe de qué habla. No hará las bestialidades que hizo Duque con la economía de Colombia. A todos tratamos de recordarles que hace cuatro años uno que otro personaje y enemigos de Gustavo decían que si él ganaba las elecciones el dólar llegaría a 4.000 pesos. Pues él no ganó las elecciones. Las ganó Iván Duque, y el dólar tocó el techo de los 4.000 pesos. Allí es cuando nos decimos que esta opinión pública colombiana es idiota de solemnidad.
Si nos encontramos con un médico o con cualquiera que labore en el sector de la salud, la pregunta consabida es la siguiente: “¿Será cierto que si Petro sube va a cerrar las EPS?” De inmediato les respondemos que las EPS son una intermediación que no se justifica. Es una vulgar copia del modelo chileno que ya están desmontando. Muchas veces se ha tratado de hacerlo, pero es tal el poder de estos intermediaros que, a punta de terrorismo, asustan al personal de la salud. Sabemos que esto hay que modificarlo y sabemos que se han hecho muchos estudios sobre esta temática. Será el Presidente de la República quien determine el camino a seguir, consultando con usuarios y personal médico, pero nosotros, que somos simplemente usuarios y pagamos cotización sabemos que nuestra platica se diluye en una intermediación innecesaria y que dicha intermediación va en detrimento del personal de la salud, pues ha permitido pagar salarios escandalosos. Recuérdese SaludCoop, canchas de golf para directivos, fincas de recreo para ellos mismos, dineros que salieron del costo de la intermediación.
Otra pregunta que se nos hace y que provoca hacer uso de la horca es: “¿Será que Petro va acabar con la educación privada para entregárselo todo a lo público?” A estos analfabetas toca responderles: “Petro nunca ha dicho que va a cerrar la universidad privada. ¡Eso es chisme de uribista!” La propuesta que se ha hecho es que todo colombiano tenga derecho a la educación pública gratuita y si lo desea y si quiere ir a la privada… pues que lo haga.
Ya al borde de la desesperación, poque no queremos responder a más pendejadas, resolvemos decirles a quienes nos hagan preguntas sobre esto que si están a gusto en el país imaginario del cual fantasea Iván Duque, pues que se queden ahí. Que lo aplaudan y que voten por el tal ‘Fico’, pues parece que eso es lo que les gusta: el continuismo del uribismo.
Nosotros sí queremos un cambio. Queremos un país donde no se mate a la gente por pensar. Queremos un país que tenga salud, educación y servicios públicos básicos. Queremos un país donde no haya más falsos positivos, donde las bandas de defraudadores no estén conformadas por funcionarios públicos. Ese es el país que queremos y al cual aspiramos llegar algún día.
En consecuencia, nos negaremos a contestar preguntas ridículas y estúpidas. Que les aclare el chisme aquel que se los contó. Nosotros, como oposición, nunca hemos sido gobierno. Nosotros hemos pagado impuestos, no nos hemos beneficiado de los chanchullos oficiales. Que les conteste sus inquietudes aquel que les llenó la cabeza con aquello con lo cual está llena la cabeza de los pulpos.
Gracias al diario El Espectador hemos descubierto quién es el ignoto candidato a la vicepresidencia por parte de los godos. O sea, el coequipero del señor Enrique Gómez Martínez. Se trata del señor Carlos Cuartas, quien dice que su movimiento de Salvación Nacional es un startup que, traducido al castellano, quiere decir que es una puesta en marcha de la política. Si esta es la razón de ser de este movimiento entendemos que van a aprender a gobernar, experiencia que este pobre país ya supo con Iván Duque a la cabeza. No olviden que todos los días Duque trataba de aprender. Y nosotros supimos que para aprender se requiere voluntad y unas góticas de inteligencia. Estas últimas le faltaron al pobre Duque.
Según el señor Cuartas el 80% de las personas con quienes ha hablado coinciden con la identidad de Salvación Nacional. ¿Será que pasan de 10 las personas con las que ha hablado?
No sabemos con qué minorías llegará al poder el señor Gómez y su vicepresidente, pero lo cierto es que, lo que reconoce este señor, es que con quien tiene más afinidad es con Federico Andrés –alias ‘Fico’– Gutiérrez. Al terminar una entrevista en el mencionado diario dice que a la gente le gustan las propuestas de Salvación Nacional y que están sobrados. Nosotros decimos que están sobrados de buenas intenciones, pero como escasongos de electores.
El liberalismo colombiano aún recuerda la violencia chulavita en Yacopí, Caparrapí, La Palma, y otros lugares del país durante la égida conservadora, donde ser liberal era casi que ser guerrillero. Nosotros no queremos más violencia. No queremos más monseñores Builes desde el púlpito pidiendo matar liberales por “la salvación del país”.
Adenda: Nuestro periodista de cabecera, Francisco Cristancho R., nos cuenta que hace varios días está rodando por las redes una curiosa imagen que aquí compartimos. Según los chismes, podría tratarse de un “permiso” otorgado por el Inpec al condenado Luis Alfredo Ramos para tratar algunos temas de campaña y apoyo a alias ‘Fico’. ¿Tendrá alguien mayor información sobre la reunión Ramos-Char?
Feliz semana de pascua. Y, en vez de preguntarnos más sobre lo que pasa en Venezuela… ¡Pregúntenos qué es lo que está pasando aquí!
Ciao
Las opiniones realizadas por los columnistas del portal www.laotravoz.co no representan la identidad y línea editorial del medio. Les invitamos a leer, comentar, compartir y a debatir con respeto.