Qué bonito bolero es “Perfidia”. Con Los Panchos y esta canción muchos lloramos antaño. Con la última perfidia los amigos de la paz lloramos, pero de la piedra.
Pobre Mickey Mouse y pobre Minnie porque el pésimo ex-fiscal Néstor Humberto Martínez (NHM) puso de moda el entrampamiento. La única trampa que nosotros de chiquillos conocíamos era aquella en la cual había un resorte y en el centro un ganchito al que se prendía un pedazo de queso, que provocaba al roedor –ávido de nutrirse– a lanzarse a comer, sin saber que con ello accionaba una trampa que le causaba lesiones. El entrampamiento del que hablaremos hoy tuvo como víctima a la paz de Colombia y como autor al siniestro Néstor Humberto, quien montó un falso negocio que tenía como propósito hacer caer ya no al ratón Pérez, sino a Santrich, y con él, todo el proceso de paz con las FARC. Martínez no resistía que la tranquilidad y la concordia se instalaran en el país, pues son sentimientos ignotos para él y por ello nos quería negar la posibilidad de la paz.
Entre quienes se prestaron para este entrampamiento hubo agentes del Estado, en particular miembros de la fuerza pública y cuadros de los servicios de inteligencia, quienes sin pensarlo dos veces traicionaron a los ciudadanos que renunciaron a la insurgencia armada y depusieron sus armas, que eran también sus armaduras. Y de la misma forma supieron defraudar la concesión que les hicimos al confiarles nuestra seguridad. Confiamos en que esta vez no habrá impunidad; en que se conocerá la verdad sobre esta maniobra sucia y delictiva que en derecho tiene nombre de bolero y en que se determinarán responsabilidades penales respecto de todos los implicados.
Son tan ridículas las afirmaciones de Néstor Humberto Martínez sobre el entrampamiento que solo a él se le podrían ocurrir. La última ‘perla’ es una propuesta de crear un tribunal para decidir a quién creerle: si a Petro, al canciller o a él. Obvio es que él ya tiene una postura al respecto, pero no la tendrá fácil pues tendrá que obrar como parte y como único testigo a su favor.
Pero si el país está de malas con sujetos de esta calaña, mucho peor está el Externado de Colombia por estos días. Resulta que el paracaidista Emilio Archila Peñalosa, primo de Kike, se coló por las rendijas democrático-educativas y levantó chanfa en una institución llamada Centro de Paz, de reciente creación en la Universidad. Nuestro amigo Ramiro Bejarano (@RamiroBejaranoG) –quien cuando de decir verdades se trata está presto a no callar– ha denunciado la llegada del señor Archila al campus universitario por la puerta de atrás, en los siguientes términos “Un Centro de Paz creado por @UExternadodirigido por Emilio Archila, quien fracasó en ese tema en el gobierno, en cuyas narices se extraviaron recursos, es una afrenta no solo a la comunidad externadista. Funcionarios cuestionados intentando rehabilitarse en la Universidad.”. Quienes conocen a este individuo y recuerdan las gestiones que adelantó en detrimento de la paz durante el sainete de gobierno de Duque, saben que por la paz en el Externado hará lo que el grandote de su primo en Bogotá: ¡estorbo!
Ad portas del nombramiento de Archila en esta prestigiosa universidad, sigue sin aclararse su papel en el cobro de comisiones por parte de políticos conservadores para la ejecución de proyectos financiados por el fondo OCAD-Paz y destinados a la implementación del acuerdo de paz, pues la investigación anunciada con bombos y platillos en el albor del escándalo está más quieta que La Rebeca sin agua en los alrededores del barrio San Diego. Al Externado la presencia de Emilio le será tan innecesaria como destinar un gotero para el suministro de agua en la fuente antedicha. Queda por preguntarse, ¿a quién le están haciendo el favorcito? ¿A Kike o a su primo?
–Cambiando de tema– Recordarán ustedes una famosa obra de Gabriel García Márquez que se titula El coronel no tiene quién le escriba. Por estos días los mamagallistas han resuelto cambiar el título de la obra por Los generales no tienen quién les escriba, ello tras la reciente decisión del presidente de la República de descabezar, en ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales, a un jurgo de generales que, al parecer, no nacieron para hacer lo que estaban haciendo. Dicen los entendidos en la materia que el Presidente tendrá que recurrir a los coroneles para llenar las plazas de los generales depuestos. Amanecerá y veremos.
En punto de la milicia, preocupadísimos están los herederos de Zapateiro y sus seguidores políticos porque el presidente de la República dio la orden de que no se bombardeen campamentos en los que se observe la presencia de menores de edad. Todo indica que el presidente Petro se abstendrá de interpretar el ridículo papel de Iván al condecorar homicidas bajo el argumento de que así alcanzaría la paz. Hoy podemos decir que la política de las “máquinas de guerra” terminó, con lo cual queremos extenderles una pregunta que nos ha rondado por estas dos primeras semanas del nuevo gobierno: ¿cómo hizo este país para resistirse las sandeces de Iván Duque por cuatro años consecutivos?
Adenda: gracias a la terquedad del senador Wilson Arias (@wilsonariasc), al innombrable le tocó devolver no sé cuántas hectáreas de terrenos baldíos de las que se había apropiado sin vergüenza alguna. Parece que el caballero se atortoló después de conocer que la justicia iba tras él y decidió devolver esa tierra mal habida. Felicitamos a Arias porque esta era su pelea, la tenía casada y demostró que no estaba denigrando del ex-presidente sino probando su falta de moral. Está por verse si el propietario del Grupo Aval seguirá el ejemplo de su gran amigo.
La coletilla de hoy está a cargo del ex-presidente de la República, Ernesto Samper Pizano, quien con el título de esta canción describió la conducta del entrampamiento: “El entrampamiento a Santrich no fue solamente a él, fue a todo el proceso de paz, porque por cuenta de este cundió el pánico entre varios de los firmantes del acuerdo que salieron corriendo por La Guajira a refugiarse en la frontera con Venezuela, entre ellos el mismo Iván Márquez. Esta revelación configura, en términos internacionales, el delito de perfidia, que es el engaño que comete una de las partes respecto a otra en una negociación y que podría de alguna manera invocarse para aceptar el regreso de los que se fueron asustados por el entrampamiento al proceso de paz. Es una simple hipótesis para estudiar pero insisto en que la trampa no solamente le costó la vida a Santrich sino que le costó la paz a muchos de los firmantes del acuerdo.”
De última hora…
La prestigiosa editorial Legis será protagonista en la reaparición del programa de televisión Consultorio Jurídico. Legis suministrará la mayoría de los premios a los concursantes del reconocido concurso ¿Cuánto le enseñaron, cuánto aprendió?
La primera emisión de Consultorio Jurídico está programada para el próximo 27 de septiembre a las 7:30 pm por el Canal TeleAmiga, y promete ser todo un éxito.
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