Muchos políticos, pensadores, medios de comunicación y un sinnúmero de personalidades se han desgastado realizando especulaciones, comentarios, juzgamientos, planteamientos etc, sobre las acciones reprochables de las FARC, las cuales llevan más de medio siglo dejando grandes heridas y cicatrices al pueblo colombiano. Pero nunca, han puesto en la palestra pública a los verdaderos culpables de la existencia de la FARC; quién a mi criterio y de la mayoría de los colombianos, deberían ser llamados a responderle al país mediante un juicio político, jurídico y social por la creación, existencia, permanencia, fortalecimiento y por todo su obrar doloso y criminal de este grupo armado al margen de la ley, que durante 53 años causó terror en todo el territorio colombiano. Ellos son los ex-presidentes que tuvieron sus mandatos en esta república, desde los años 1964 hasta el 2010, o sea desde la fecha donde nació este grupo guerrillero a la vida pública, hasta el año que ceso su inolvidable accionar malvado, con la firma de la paz.
Estos ex-gobernantes de Colombia a partir de Guillermo León Valencia del Partido Conservador, que gobernó desde 1962 a 1966, periodo en el cual nació la FARC, y los demás sucesores que permitieron su permanencia: tenemos los siguientes: desde 1966 – 1970 , Carlos Lleras Restrepo del Partido Liberal, 1970 – 1974 Misael Eduardo Pastrana Borrero del Partido Conservador, 1974 – 1978 , Alfonso López Michelsen del Partido Liberal, 1978 – 1982 , Julio César Turbay Ayala del Partido Liberal, 1982 – 1986, Belisario Betancur Cuartas del Partido Movimiento Nacional, 1986 – 1990, Virgilio Barco Vargas del Partido Liberal, 1990 – 1994 , Cesar Gaviria Trujillo del Partido Liberal, 1994 – 1998 , Ernesto Samper Pizano del Partido Liberal, 1998-2002 Andrés Pastrana Arango del Partido Conservador , 2002 – 2006, Álvaro Uribe Vélez de familia de abolengo liberal, y 2006 – 2010, Álvaro Uribe Vélez reelecto.
Ellos debieron combatir militarmente o haber llegado a acuerdos de paz para el cese de actividades de este grupo guerrillero, pero no le cumplieron al país.
Aunque el ex-presidente GUILLERMO LEÓN VALENCIA, El 14 de mayo de 1964 inició la Operación Marquetalia, un feroz combate por aire y tierra con 16.000 soldados y la asesoría de militares estadounidenses del Plan Laso (Latin American Security Operation), un capítulo de la Guerra Fría para la región, contra las guerrillas comunistas de la FARC. “Manuel Marulanda” ordenó que todos aquellos que por su condición física o familiar no pudieran enfrentar la guerra serían evacuados. “El gobierno nos ha decretado una guerra que se puede prolongar por muchos años”, dijo Marulanda. En aquel entonces. Sólo se quedaron para hacerle frente al ataque militar, 52 campesinos y dos mujeres.
“El 20 de julio de ese año se realiza la asamblea general de los pobladores de Marquetalia, en el Dpto. del Tolima, ya dentro de la selva que teníamos por única casa, y se define que a partir de esa fecha nos convertiríamos en guerrilleros revolucionarios», escribió luego el comandante Guaracas.
Pero al fin y al cabo, LEÓN VALENCIA, no fue capaz de eliminar militarmente a la FARC en esa época, y menos los demás presidentes, aunque la mayoría de ellos, realizaron intentos militares y de diálogo, pero todos fueron fallidos.
Ellos tenían el poder, las armas y la legitimidad, para haberlos combatido militarmente o haber llegado a un acuerdo de paz mediante el diálogo, desde décadas atrás, habían podido evitar los miles de muertos, desplazados, destrucción, miseria, torturas, desaparecidos y todo ese dolor que embarga a este pueblo colombiano; ¿Serían incapaces o encontraron en esta guerra beneficios políticos, lucrativos personales o mantener como un sofisma de distracción este conflicto para algunos enriquecerse?
Ahora, los ex presidentes sobrevivientes, sin ninguna autoridad moral ni ética, son los mayores opositores de los diálogos de paz, que adelanta el actual gobierno, sin importar lo que clama la mayoría de colombianos, que es la paz ya.