“Dios da sus batallas más duras a sus guerreros más berracos – JHOAN SEBASTIÁN BONILLA BERMÚDEZ luchó tan fuerte y bravo por 142 horas. Él dio su vida por su patria y por ustedes!! Que su muerte nunca sea en vano!! Desde lo más profundo de mi alma le suplico a toda Colombia: NO MÁS MUERTOS – NO MÁS SANGRE – NO MÁS ODIO – NO MÁS GUERRA ENTRE NOSOTROS MISMOS 😭💔🙏🏻 TODOS SOMOS PUEBLO Y EL AMOR SIEMPRE SERÁ LA RESPUESTA 💓🙏🏻💓”
Rebecca Linda Marlene Sprößer*
Al leer la carta de despedida de la ciudadana alemana Rebecca Sprößer para su valiente amigo JHOAN SEBASTIÁN BONILLA BERMÚDEZ, quien falleció después de ponerse como escudo humano para salvarla a ella en un atentado sicarial, que recibieron ambos en la ciudad de Cali el 22 de julio del año en curso, no pude contener las lágrimas. Sí, lloré esa muerte como también he llorado la de Dilan Cruz, Lucas Villa, y de todas las personas que han perdido la vida de manera violenta en esta Colombia en guerra, gobernada por corruptos, codiciosos, enemigos de la Paz.
¿Cuánto vale una vida y quien vela por ella?
La vida de cualquiera de nosotr@s no tiene precio, somos un milagro único e irrepetible, por esto debemos ser cuidadores de la nuestra, de la de los demás y exigir al estado que cumpla el rol de garante de los derechos fundamentales. Conozcamos algunos apartados la constitución de Colombia frente al respeto por la vida.
El pueblo de Colombia, en ejercicio de su poder soberano, representado por sus delegatarios a la Asamblea Nacional Constituyente, invocando la protección de Dios, y con el fin de fortalecer la unidad de la Nación y asegurar a sus integrantes la vida, la convivencia, el trabajo, la justicia, la igualdad, el conocimiento, la libertad y la paz, dentro de un marco jurídico, democrático y participativo que garantice un orden político, económico y social justo, y comprometido a impulsar la integración de la comunidad latinoamericana, decreta, sanciona y promulga la siguiente:
Articulo 2: Las autoridades de la República están instituidas para proteger a todas las personas residentes en Colombia, en su vida, honra, bienes, creencias, y demás derechos y libertades, y para asegurar el cumplimiento de los deberes sociales del Estado y de los particulares.
ARTICULO 11. El derecho a la vida es inviolable. No habrá pena de muerte.
ARTICULO 12. Nadie será sometido a desaparición forzada, a torturas ni a tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.”**
En Colombia el diario vivir evidencia la falta de coherencia entre lo que este escrito en la constitución y lo que pasa en la realidad. El milagro de la vida es borrado incesantemente ante los ojos de un estado que muchas veces es el violador de los derechos y muchas otras veces es cómplice de los actos de violación a los derechos humanos, por omisión, o connivencia con los criminales.
Las cifras son escalofriantes mas de 80 asesinatos desde el 28 de abril, al 28 de julio día en que falleció JHOAN SEBASTIÁN BONILLA BERMÚDEZ como lo mencionamos al comienzo de este texto; el mundo entero ha visto el horror que hemos padecido en los últimos días. En solo tres meses de represión policial ya hemos superado los asesinatos que se dan en cualquier otro país del continente Americano en todo un año. Esto de por si es escandaloso, debemos encontrar la manera de parar la violencia y de frenar esas causas estructurales que la han permitido.
Hagamos un alto en el camino, es la vida la que se está perdiendo, son líderes y lideresas, personas del común, que, como cada uno de nosotros, tenía sueños, padres, familiares, amigos, un tejido social a su alrededor. Es un gran patrimonio humano el que se nos va con cada muerte violenta. Es hora de defender la vida entre tod@s. Nadie tiene el derecho de eliminar a otra persona, ni aquí ni en ninguna otra parte del mundo. En Colombia lo dice la constitución no hay pena de muerte. Cualquier asesinato es inaceptable, hagamos un llamado a la razón, a la lógica de la vida.
Soñar no cuesta nada
Permitámonos soñar una Colombia en paz para tod@s, donde haya vida digna, respeto por la humanidad del otro, espacio para convivir sanamente con la diferencia, con la diversidad, la multiculturalidad. Esta tierra abundante y rica en recursos, da para tod@s.
Es claro que el conflicto es inherente al ser humano, pero está en nosotros buscar la manera pacífica de enfrentarlos y superarlos.
Soy un ciudadano de a pie que solo pide paz individual y colectiva, justicia social, verdad, reparación para las víctimas, recomposición del tejido social que lleva roto mucho tiempo. Se que ese es el sueño de muchos y por eso lo comparto aquí en este texto. Hoy con humildad digamos al mundo entero que les necesitamos, que nos ayuden a dar un paso adelante como nación.
Somos más fuertes que aquellos que usan las armas, el terror, la guerra y la violencia. El legado de cada líder asesinado sigue hoy más vivo nunca en cada uno de nosotr@s.
Dedicado a todos l@s soñador@s Colombian@s y a las víctimas directas e indirectas de esta violencia entre herman@s.
* Carta de Rebecca Linda Marlene Sprößer a su amigo JHOAN SEBASTIÁN BONILLA BERMÚDEZ https://m.facebook.com/story.php?story_fbid=10157768752791580&id=648771579
** Constitución política de Colombia. https://www.mininterior.gov.co/sites/default/files/constitucion-politica-colombia_2.pdf