Por: Horacio Duque
Se podrán tener muchas discrepancias con el ex presidente Santos en diversos asuntos pero en lo atinente al enfoque y gestión de la vieja guerra colombiana hay que admitir su enfoque apropiado por lo que fueron los diálogos y negociaciones con las Farc y también por la organización de las conversaciones con el Eln que iban por buen camino en Quito y en La Habana hasta el 7 de agosto pasado. En adelante, con Duque y el uribato, todo devino en el caos que resultó en el hecho siniestro de la sede de la Policía antier 17 de enero. Que por lo demás nos trae a la memoria otros eventos de esas siniestras dimensiones como ocurrió con el Palacio de Justicia en la Presidencia de Betancur y lo del Club del Nogal en el segundo mandato de Uribe. A Santos lo que es de Santos y a Porky la guerra que se nos vino encima por 10 años o más años. Triste.Epocas de neo fascismo.