Si Dios se equivocó cuando construyó el mundo, ¿por qué nosotros no podemos equivocarnos en esta modesta columna?
La Virgen no se le aparece solo a los tontos, también a los diablos. Andábamos desprogramados buscando un tema para tocar en la próxima columna –así como el músico que no sabe por dónde empezar la serenata– y de pronto, el diablo de la inspiración nos indujo a abrir Twitter. El primer tuit que se desplegó nos dejó sorprendidos. Era de la profesora y socióloga Martha Elena Rangel y se leía “Uno no sabe qué pensar, pero no se les olvide que es la ex de Fajardo”. Sin saber de qué se trataba el comentario, hicimos lo del gatito travieso junto a la anciana que teje: agarramos la punta de la lana, comenzamos a jalar, y empezaron a salir cosas que no esperábamos.
Hasta hace unos días nosotros creíamos que Fajardo era un santo, al igual que quienes lo defienden a ultranza. Esa imagen quedó desvirtuada tras leer la opinión de Lucrecia Ramírez-Restrepo, quien se unió a las críticas de cientos por un comentario en el que el candidato invitaba a “pasar la página de los últimos 20 años sin recurrir a los linchamientos o a la violencia”. Al tuit de Matilde de los Milagros, en el que criticaba la postura de Fajardo y afirmaba que “Violento es decirle a la multitud de víctimas que tienen que “pasar la página”. No necesitamos cerrar un capítulo sino revisarlo, en detalle y sin silenciar las emociones, para que haya justicia, verdad y reparación. Los colombianos tienen derecho a su rabia y hay que respetarla”, respondió Ramírez-Restrepo: “Me consta que él no sabe de verdad, justicia y reparación. Por eso dice tan campante que pasemos la página. Es que de verdad no entiende. Ha conseguido que TANTAS veces en su vida privada pasen la página, que está convencido de que en el mundo público también le van a hacer caso.” Es de notar que Lucrecia Ramírez-Restrepo fue pareja de Sergio Fajardo y estuvieron casados por un largo periodo.
Seguimos jalando la pita y encontramos varios comentarios que terminaron por desatar el ovillo y con ello, conocer al santo y a las beatas. En respuesta al tuit de Ramírez-Restrepo, Martha Rincón escribió: “No debió ser fácil para ella, haber escuchado todo el tiempo en la W, las aventuras que tenía Fajardo en Portugal, era horrible como Julio se jactaba de ello. Valiente y correcta. Nunca armó un escándalo.” El comentario de Lucrecia y las reacciones en redes sociales rápidamente se hicieron noticia, como puede leerse en esta nota de Las2Orillas.
Como diría un gamincito a otro gamincito, después de darle un coscorrón: “es que justicia sale a la caricia”. Con todo esto recordábamos que, durante la campaña para elegir alcalde de Bogotá, un grupo de damas levantaron calumnias al candidato más opcionado en beneficio de una furibunda fajardista y todo el mundo –especialmente desde las salas de redacción– censuraba al calumniado porque el corifeo lo había declarado un maltratador de mujeres. Hoy, la justicia ha confirmado que dichas alegaciones no eran ciertas, que él nunca ejerció violencia económica o de otra índole contra su esposa y, por el contrario, que había cumplido sacramentalmente con sus obligaciones alimentarias. En síntesis, los tribunales han puesto las cosas en orden. Entre tanto, los engañados votantes eligieron a la peor alcaldesa en la historia de Colombia, digna émula del doctor sin título ‘Kike’ Peñalosa. ¿Será que quienes contribuyeron a esta mentira saldrán a “destapar las cobijas” de Fajardo para malograr su aspiración presidencial como al mejor candidato a la alcaldía le dañaron la suya? Dicen los carpinteros que la tachuela se ríe cuando ve que con la pinza se sacan un clavo.
–Cambiando de tema– Supimos que “Ivancho” –el presidente– se quitó de encima a la eterna burócrata, Nancy Patricia Gutiérrez, ex-representante a la Cámara; ex-presidenta de la Cámara; ex-ministra; ex-sindicada de vínculos con los paramilitares y ahora ex-consejera presidencial. Según nos cuentan, el puesto de embajadora en la Santa Sede estaba ocupado, por lo cual se quedó sin premio de consolación. ¿A dónde la mandará la Casa de Nariño? ¿O se dedicará a organizar festivales turísticos en Girardot? Esto último siendo lo que ha debido hacer, en vez de meterse de uribista y aceptar un cargo para el cual no estaba preparada. Feliz viaje Nancy, buen viento y buena mar.
–En otra línea– Los resorts del INPEC se están quedando sin huéspedes ilustres gracias a los múltiples domicilios carcelarios que los jueces están otorgando cuando se trata de delincuentes de dedo parado. Veamos… a una ilustre dama de la Costa –amiga de la élite cartagenera– le pichonearon un arma de fuego, un kilo de cocaína y un jurgo de billetes al interior de su camioneta cubierta de publicidad política, pero seguramente por sus buenas influencias no la mandaron a la chirona sino a su residencia, para que pueda seguir tomando el té con sus amigas que la visitan todos los días a las 4:00 de la tarde a llevarle chismes, arepa de huevo y carimañolas. Para parecer ingleses se toman el té a esa hora, pero no dejan lo costeño, pues no desaprovechan la oportunidad para embutirse ‘fritos’. Desde esta columna le enviamos nuestros mejores deseos a doña Gloria Estrada y esperamos que su estadía en la casa no sea muy prolongada, así podremos verla de nuevo muy pronto en el club, junto a uno que otro congresista costeño.
Preocupadísimos están los dueños de hatos y corrales de pensar que en una de estas –más tarde que temprano– el señor Lafaurie termine encerrado. Según aseveraciones procesales conocidas la semana pasada, los ganaderos, junto con los paramilitares, manejaban la política colombiana al extremo de postular, negociar y elegir al chino Mario Iguarán como fiscal general; el mismo que hizo todo lo posible para que los encartados en el fraude de la segunda reelección de Uribe terminaran más limpios que el pañal del Niño Dios. Nos dicen que Iguarán está muy tranquilo, e incluso dice que, si el actual fiscal era el segundo mejor abogado de su época, él lo supera en modestia. Pareciera que ambos fiscales hubiesen sido compañeros de clase en algo como ‘la facultad de la humildad’, cátedra que, dicho sea de paso, se requiere con urgencia en la Universidad Sergio Arboleda. Eso sí, de la habilidad de Barbosa como investigador no duda nadie, como dijo Wally (@MeDicenWally): ““Yo hubiera encontrado al que mató el mar muerto en dos días” –Fiscal Francisco Sherlock Holmes Barbosa.”
Adenda: recordando entrevistas que le han sido hechas al gran Fernando Vallejo, nos gustó mucho una en la que se refiere a su obra La puta de Babilonia. Dentro de los apodos que le han puesto a Dios, no nos cabe que se merezca el grado de maestro y gran arquitecto de la creación, pues nosotros no le confiaríamos ni la construcción de la casa de nuestras perritas, Trufa y Nieve, a un arquitecto cuya obra perfecta está llena de goteras y pisos hundidos. ¿O es que acaso el mundo le quedó bien hecho? Si está lleno de maldad, crimen, injusticias, tragedias y desastres. Y como si fuera poco, desperdició un montón de material, pues dejó sueltas millones de bolitas como esta por el espacio, que de vez en cuanto se estrellan o se acercan peligrosamente a nosotros. ¿Por qué Jehová no puso semáforos para evitar esos estrellones que terminan rompiendo estrellas? ¿Por qué no diseñó bien las cañerías del planeta Tierra y así se hubiera evitado el diluvio? Hasta que no nos responda, nos abstendremos de contratarle para el refugio de nuestras malteses, o para cualquier otro efecto semejante.
Adenda dos: en estos días Maduro dijo que para ganarle a Duque, podría hacerlo con simples soldados rasos. Cuando MaMolano lo escuchó, creyó que se trataba de soldados rusos y por eso anda organizando un conflicto internacional.
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