Entre el actual sub Presidente de Colombia, el señor Ivan Duque, y la poderosa oficina de la criminalidad del municipio de Envigado quieren subir a la jefatura del estado colombiano al ex alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez.
La Oficina de Envigado está movilizando descomunales fortunas para dar sustento a la campaña publicitaria del Gutiérrez quien recibió recientemente más de 100 millones dólares (medio billón de pesos) de los 52 clanes mafiosos con los que estáinundando el país de vallas publicitarias y de propaganda en las redes, que en el primer caso ha necesitado de la mano firme de los alcaldes de Cali y de Pereira para frenar este abuso contaminante de la propaganda neonazi del representante del uribismoordenando su eliminación por constituir una clara violación de la ley y un abuso con la ciudadanía.
La otra mano manipuladora para favorecer a Gutiérrez es la de Duque quien está orientando diversos recursos del gobierno con el fin de ampliar los privilegios que le den ventajas al candidato.
Duque está actuando al margen de la constitución y de la Ley por lo que ha sido denunciado penalmente por varios sectores.
Uno de ellos es el Instituto Internacional de Estudios Anticorrupción, en cabeza de Camilo Enciso, quien lo demandó ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca por participación política en las ultimas semanas de la competencia electoral para definir tanto el Congreso de la República como el puesto del presidente en la Casa Nariño.
Según la denuncia Duque “está usando sus presentaciones públicas para intervenir en el proceso electoral para elegir el próximo presidente. Su conducta afecta de manera grave los derechos políticos de todos los ciudadanos y viola las prohibiciones expresas establecidas por el legislador en el artículo 30 de la Ley 996 de 2005, conocida como Ley de Garantías Electorales”.
En ese mismo sentido, se enumeran una serie de eventos públicos y de algunas declaraciones a medios de comunicación en las que el presidente hace referencia a las propuestas de algunos candidatos presidenciales. Por ejemplo: el 28 de febrero, el jefe de Estado habló de aquellos candidatos cercanos al régimen de Nicolás Maduro y Chávez y que por lo tanto han evitado hablar de la situación en Ucrania tras la invasión rusa.
De igual forma, relacionan eventos del mes de marzo donde Duque habla sobre la propuesta del candidato del Pacto Histórico, Gustavo Petro, que pone sobre la mesa la eliminación del Icetex. Así mismo, en el mes de abril repetidamente habla de las “tres P”, donde hace referencia al populismo. El tema de fondo de pensiones y los cambios que tendría con la llegada de algunos candidatos a la presidencia también fue criticado por el actual jefe de Estado y aportado por el Instituto denunciante
Con la enumeración de eventos, el Instituto asegura que, con “sus acciones atentan contra la moralidad administrativa y las instituciones democráticas del país. Los ataques de Duque en contra de candidatos opuestos a su partido político Centro Democrático y la amplificación de sus mensajes (garantizada por tratarse del presidente de la República), exigen la adopción de medidas inmediatas que reduzcan la distorsión del equilibrio que Duque está llamado a guardar frente al proceso electoral orientado a la escogencia de su reemplazo
También varios congresistas de la oposición aseguran que el mandatario ha hecho una incitación al odio contra otros candidatos.
Denuncian a Duque por presunta participación política a favor de Federico Gutiérrez.
Ante la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes, los senadores Roy Barreras, Iván Cepeda y RooseveltRodríguez acusaron penalmente al presidente Iván Duque por una presunta participación en política.
Según los congresistas, hay suficientes pruebas, como videos, artículos de prensa y de revistas, que soportan esta acción penal.
Cuando el gobernante de un país interviene en la política, tiene candidato y hace esfuerzos por derrotar a los otros candidatos está rompiendo el eje de la democracia, el respeto por la voluntad de los ciudadanos y la alternancia de poderes. Esperamos que la Comisión de Acusación actúe porque el ciudadano Iván Duque tiene que responder ante la Constitución y la ley”, señalan los políticos de Oposición.
Los líderes de la oposición encabezados por el senador de izquierda Ivan cepeda citan como ejemplos la modificación de la Ley de Garantías, a través del Presupuesto General de la Nación, el apoyo de una buena cantidad de gobernadores y alcaldes hacia Gutiérrez, las intervenciones públicas donde descalifica a otros candidatos, entre otros.
Se considera de suma importancia, para que se respete la voluntad popular en las elecciones presidenciales de mayo, poner en conocimiento esta denuncia penal y queja disciplinaria contra el presidente Iván Duque ante las organizaciones internacionales de protección de los derechos humanos y de veeduría de transparencia electoral, como la MOE europea, afirman.
De manera cínica Duque ha contestado a estos señalamientos afirmando que no participa en política. Es un cuento que ni el mismo se cree.
Las denuncias son muy graves y a lo anterior se debe agregar el fraude orquestado desde las esferas gubernamentales para el impedir el triunfo casi seguro del candidato del Pacto Histórico Gustavo Petro.
Hoy, Colombia está al borde de un gran viraje histórico como el que ocurrió en 1930 cuando el descredito de la Hegemonía conservadora de aquella época dio al traste con las pretensiones del partido conservador de proseguir con el control del estado, pero la crisis económica, las masacres de estudiantes y las manifestaciones populares frenaron tal pretensión. Antes de la cauda de los conservadores los debates del congreso obligaron la renuncia del Ministro de Guerra Ignacio Rengifo artífice de la masacre de las bananeras y de los estudiantes en Bogota.
Más o menos es lo que estamos observando hoy en esta agitada transición política.
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